La razón principal por la que decidí leer
este libro fue una conversación en internet sobre la suerte que corrieron
soldados franceses durante la guerra de la Independencia. Miles de ellos fueron
capturados después de la Batalla de Bailén, fueron llevados a unas barcazas en
Cádiz y posteriormente a la isla de la Cabrera donde fueron abandonados a su
suerte y donde fueron muriendo a cientos de hambre y enfermedades. Una conocida
dijo que en este libro se hablaba de ello. Pero no es así. La historia, el que
hace la segunda narración, La Cruz, narra en realidad la espantosa historia de un
Coronel que a poco de pasar la frontera es objeto de una emboscada por parte de
guerrilleros españoles. Qué mal lo pasa el pobre y qué final más triste.
El primer cuento se llama “Historia de un
ocaso” y trata sobre el destierro al que es sometido la que fuera favorita del
Rey, Madame de Prie. Lo doloroso que es descubrir ya no le importas absolutamente
a nadie cuando has tenido el mundo agarrado de la pechera.
El tercero se titula “Un vago” donde un
estudiante sufre por un hecho del pasado que le marcará profundamente el resto
de su corta vida: el suspender un examen casi sin importancia y que le lleva
con el tiempo a la perdición.
Amok, que es el que hace el cuarto y que da
nombre al libro entero, trata de la historia que le cuenta un pasajero de un
barco a quien lo narra. El pasajero es un médico que ha servido en un país
oriental y lejano, apartado de toda civilización. Acostumbrado a tratar con
mujeres del lugar, demasiado accesibles y por eso falto de interés, es visitado
por una mujer blanca, interesante, guapa y altiva que le pide un favor que le
traerá graves consecuencias.
En la Calle del Claro de Luna, un hombre
queda anclado por una noche en una ciudad portuaria y se ve envuelto en
extrañas intrigas en torno a una mujer y a un hombre que quiere matarla. Es
como una pesadilla bajo la luna.
En Leporella, uno de los cuentos más famosos,
se cuenta la historia de una mujer que no goza de ningún atractivo por más que
se la observe. Una criatura desgraciada a la que solo le hubiera bastado un
poco de atención de su señor. Ella servía en una casa bien.
En Episodio en el Lago Leman un hombre es
recogido en mitad del lago. Es una especie de náufrago que no entiende el
idioma y que no se sabe muy bien cómo ha ido a parar allí. Está atrapado y solo
quiere volver a su casa. Pero no puede.
Hay un denominador común en cada historia y
es la angustia que soportan los protagonistas. Y en el que en casi todos los
casos, el final es el suicidio.
No está mal, pero no es de los mejores libros
que he leído de Zweig.
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