domingo, 23 de abril de 2023

SPINOZA, EL MARRANO DE LA RAZÓN. YIRMIYAHU YOVEL.


 Otro libro que jamás habría comprado de no haberlo visto en unas de las librerías favoritas, la Solidaria. Es de las pocas en las que intuyes que puedes encontrar algo valioso (para mi) a un precio bajo. En este caso 4 euros. Editorial Mario Muchnik.

  El libro tiene más de cuatrocientas páginas pero es denso y largo de leer como uno de ochocientas. A pesar de todo tiene partes interesantes y claras. Otras en cambio me han costado mucho seguirlas. Casi diez días empeñados en su lectura.

  A Savater le Spinoza y por eso me hizo escogerlo en la parte de filosofía. Es uno de los primeros en despojar lo religioso de lo racional. El hombre ya está preparado para asumir su finitud, su soledad, su falta de esperanza, ¿O no?

  Dedica un capítulo casi entero a nuestro Fernando de Rojas y su Celestina. El lema de éste: caute, Prudencia. Por cierto que el joven Rojas escribió su obra con veinte años.

  Spinoza pedía que “se diera legitimidad política a todas las opiniones, es decir, a gran cantidad de errores, siempre que no se reivindicaran por encima del Estado soberano y conforme a las leyes”. Qué cosa tan lógica y cuánto sufrimiento ha costado a través de los siglos el no contemplarlo.

 

  “Spinoza da por sentado que la cultura, el lenguaje, las costumbres y las mentalidades cambian y evolucionan, dejando a la vez marcas descifrables”.

  Heine: “La muerte de Dios no deja al hombre huérfano sino señor potencial de sí mismo; Dios en miniatura, creador de todos los valores y de su universo”. También: “Los hebreos ven a Dios como un tirano tronante; los cristianos como un padre amoroso; Rousseau y sus discípulos, toda la escuela de Ginebra, como un artista inteligente que fabricó el mundo más o menos como su papá fabricaba relojes; y adoran la obra y alaban al Señor de allá arriba”.

  Nietzsche: “Todo lo profundo ama las máscaras”.  

 

  Tiene capítulos dedicados a Spinoza con Marx, con Nietzsche, con Freud, con Heine.

  “Freud subrayó muchas veces su origen. Hasta llegó a decir que únicamente un judío, desde su posición marginal, habría podido concebir el psicoanálisis. Más tarde añadió que sólo había sido capaz de hacerlo un judío sin Dios”.

  Ahí está el resumen: la razón rechaza a Dios pero Dios ayuda al hombre. Hasta cuándo no se sabe aún.

jueves, 13 de abril de 2023

MIRAR A DÓNDE. ANTONIO MUÑOZ MOLINA.

 


  Llevaba tiempo sin comprar ni leer un libro de Antonio Muñoz Molina,  siendo uno de mis escritores preferidos. En el Carrefour, entre los libros manidos de siempre, best sellers y cómics vi este en formato barato de bolsillo y quise darle una oportunidad. Según mi base de datos librescos, más de cinco años. Apenas un soplo “En el fondo de sí mismo uno no cree de verdad que todas las cosas sean tan fugaces”. Son unos diarios en la pandemia mezclados con recuerdos de su infancia y juventud con la familia. Me ha gustado mucho.

  Impresionante cuando relata la matanza del cerdo. Hasta un cerdo, con su vida de cerdo, se resiste a morir con todas sus fuerzas. También la descripción de los trabajos del padre en la huerta, de los tomates de la huerta de su familia en Úbeda que a veces le envían, los de “carne de doncella”. Es verdad que se le nota el sesgo. Raja de todos los políticos, de un lado y del otro, pero cuando quiere hacer sangre personaliza en los de siempre:

“La histérica presidenta regional acusa al gobierno de castigar a Madrid porque no permite todavía el regreso a la plena actividad”. Uno recuerda todas las medidas absurdas por las que hemos tenido que pasar, como que un matrimonio no pudiera salir con su hijo a pasear; sólo uno u otro, siendo convivientes. O salir a pasear todos a la vez a partir de una hora determinada. Nos convirtieron a todos los ciudadanos un poco en niños pequeños.

  “Uno debería irse como se fue él, todavía fuerte, lúcido, activo, sociable, con ganas de vivir, disfrutando de la comida y el vino, de los paseos largos que daba, levantándose al amanecer dondequiera que estuviese para visitar el mercado, haciéndose amigo de los vendedores”. Así hablaba de su padre. Así me gustaría que hablaran de mi cuando me vaya. Ese, todo mi legado.

  “Estaba muy dormida cuando la despertó su respiración agitada, el modo en que se removía a su lado en la cama. Oyó un estertor, como una queja, o un ronquido. Un momento después él estaba muerto. No llegó a despertarse. Quizá soñó que se moría”. Qué certeza!!

  AMM tiene ese observar de los buenos escritores: observar e inventar vidas ajenas: “Hay en los movimientos de esa pareja un aire de complacencia sexual, como de que les dure todavía el rastr de dulzura de un polvo reciente”.

  Referencias culturales: “Max Aub fue políticamente un raro entre sus contemporáneos, a la manera de Orwell o de Chaves Nogales”.

  Este libro lo he leído durante los últimos días que pasamos en Mallorca, en las cafeterías del puerto de Sóller, En el paseo marítimo enfrente de mil barcos de vela, en las salas de espera del aeropuerto de Mallorca y Madrid. Me reconcilié con él.

 

miércoles, 12 de abril de 2023

LA CIVILIZACION DEL ESPECTACULO. MARIO VARGAS LLOSA. Y UNOS DÍAS EN MALLORCA.

 


    Hemos pasado unos días en Mallorca los cuatro, en Sóller. Tiempo perfecto. Mejor que en verano. Mejor que invierno y, si no, que se lo pregunten a George Sand. Muchos turistas pero no como en época estival. Nada de apreturas. Nos comimos un arroz superior en Fornalux, Ca Nántuna, que recordaremos siempre. Ya en los aperitivos nos habían ganado: una espectacular sobrasada pasada por la plancha. Y alrededor, las montañas de la sierra de Tramontana.

  Una mañana en la cala de Deiá, donde cada día iba el poeta Robert Graves a zambullirse en las aguas cristalinas. Me dice mi primo que conoce a su hijo y que tiene una banda de música.

  Una pateada el jueves santo por todas las calles aledañas de la catedral y más allá. Después de cenar nos sentamos en un banco a ver pasar los pasos de la procesión. No acababa nunca. Cada paso con sus braceros, sus capuchas enhiestas (otros la tiene flácida no sé el porqué), con su banda de música. Los niños descubiertos recogiendo las gotas de cera de las velas.

  Otra tarde visitamos una de las librerías más bonitas que he conocido: Babel. Mientras que nos tomábamos unos blancos servidos por una guapa y simpática camarera yo miraba los libros de viaje en las estanterías de enfrente.

  De toda Mallorca posiblemente lo que más me guste sea la bahía de Sóller. Qué ratos más buenos he pasado en la terraza del restaurante Roma leyendo mientras me curaba, con un café bien caliente, del aguachirri del café del desayuno del hotel, mientras ellas se tumbaban en la playa del Repic a tomar el sol. En el próximo viaje me llevo los aperos de montar en bici. Tienen un sitio de alquiler de bicis estupendísimo. Buenas marcas con modelos tope de gama.

  Me llevé para leer La civilización del espectáculo de Vargas Llosa, un ensayo sobre la desaparición de la cultura tal como la hemos entendido hasta ahora.

  El ensayo es en realidad un ensayito entremezclado por el conjunto de unos artículos en El País seleccionados para la ocasión. Todo perdonado al gran Nobel. Él mismo pide perdón en la contraportada o más bien lo aclara: “Este pequeño ensayo no aspira a abultar el elevado número de interpretaciones sobre la cultura contemporánea”.

  Lo compré en la librería solidaria de Argüelles, o sea, doble perdón, y por cuatro euros. En edición cuidadísima de Alfaguara.

  Para reseñar su tesis MVLL echa mano de los grandes pensadores actuales: Debord, Steiner, Lipovetsky, etc. Y critica, en mi opinión con bastante razón, la estafa de los artistas contemporáneos rodeados por poco más que el boato de críticos interesados. Los cuadros blancos y rajados de aquel “pintor”, las latas de caca del otro artista, etc.

  Se habla de la religión, de su fuerza socializadora: La fuerza de la religión es tanto mayor cuanto más grande sea la ignorancia de una comunidad”. Para mí que los sacerdotes de ahora son como youtubers fracasados y que los verdaderos youtubers han cogido con ganas el rol de aquellos.

  “Los hombres se empeñan en creer en Dios porque no confían en ellos mismos. Y la historia nos demuestra que no les falta razón pues hasta ahora no hemos demostrado ser confiables”.

  La paradoja de una mentira practicada por un periodista que se inventaba entrevistas: Tommaso de Benedetti. “Mentí, pero sólo para poder decir una verdad”.

  También señala el tema inagotable de la conveniencia o no de permitir el velo en la escuela. Estoy de acuerdo en todo cuanto dice. “¿Qué clase de libertad es esa que impediría a una niña o joven a vestirse de acuerdo a prescripciones de su religión o su capricho?”… “Es muy probable que los lleve no por gusto ni acto libre personal sino como símbolo de la condición que la religión islámica impone a la mujer, es decir, de absoluta servidumbre a su padre o marido”.

  Siempre será un placer seguir leyendo a MVLL. Más sabiendo que poco podrá escribir ya viendo su edad avanzada. Con su edad, poco más o menos, acaba de morir Fernando Sánchez Dragó.