martes, 19 de mayo de 2009

Capote, Mishima.



Al final de los estupendos relatos reunidos en forma de libro que es Música para Camaleones, a Capote le preguntan si pensaba mucho en el suicidio: “Desde luego. Como todo el mundo, menos el tonto del pueblo, posiblemente”.
Capote conocía bien a Mishima y en una biografía de éste se cita: “Ah, sí. Pienso mucho en el suicidio. Y conozco muchas personas que seguramente se suicidarán. Truman Capote, por ejemplo”.

Truman Capote era un autor brillante, refinado, dominador de las escenas sociales y gran conversador. De mente rápida. Me ha hecho mucha gracia una anécdota que cuenta en el relato “Vueltas nocturnas. O experiencias sexuales de dos gemelos siameses”; es sobre las ventajas e inconvenientes de ser célebre: Estaba en un bar atestado de gente y cerca de su mesa había un matrimonio de mediana edad, ella me dio bebida y él borracho. En un momento dado la mujer se acerca a su mesa y le pide un autógrafo. El marido, molesto, se levanta y dando tumbos se acerca a la mesa, se baja la bragueta y dice: “ya que está firmando ¿por qué no me firma aquí?”. Véase cómo trabaja un cerebro rápido. Respuesta de Capote: “No sé si cabrá mi firma, pero quizá pueda ponerle mis iniciales”.

Aparte de todo eso era también un gran bebedor y drogadicto. “Soy drogadicto. Soy homosexual. Claro que podría ser todas esas cosas dudosas y, no obstante, ser un santo”. Pero aún no soy un santo; no, señor”.
Murió de sobredosis antes de cumplir 60 años.

3 comentarios:

Ana Belén dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Ana Belén dijo...

Aunque no sea de psiquiatría,tu blog roza esa fibra, se asoma a ese precipicio al que tantas veces hay que enfrentarse desde ella.
Y de psiquiatría a Castilla.Lo mencionaste hace unos días.Siempre me sorprendió y conmovió tu interés por él. No sé de dónde procedía.Sé que apreciaste la lectura de sus memorias.Él influyó y marcó por varias razones mis primeros pasos.Y en estos días he rememorado con cierta nostalgia.No podía dejarlo pasar ni dejar de comentarlo aquí precisamente.Lugares comunes.Redes de afecto.Hilos comunicantes.

Un abrazo

Hermi dijo...

Muchas gracias, Ana. Efectivamente, hay veces que te encuentras a personas con las que conectas apenas las has oído hablar. Desde hace tiempo tengo interés hacia este psiquiatra. Quizá pueda ser debido a aquel programa que echaron sobre él "Ésta es mi tierra" hace ya 15 años, o quizás a su devoción hacia la literatura. También a las reseñas tan elogiosas de sus memorias, quién sabe.
Un abrazo.