El día de mi cumpleaños me vine arriba y salí de la librería con al menos ocho kilos de libros. Unos cuantos a un euro menos este que me costó 5,95. Libros de saldo. ¿A quién le puede interesar del gran público un libro que detalla la rocambolesca historia de su publicación?
En el año 46 la paranoia contra la cultura No oficial entró en fiebre. Stalin abronca a directores de periódicos por publicar mierdas. En concreto sobre Zóshchenk, “no construimos el orden soviético para esto, para enseñarles bobadas al pueblo”.
“Los bolcheviques, en su constitución, prometían una utopía: La abolición de toda explotación del hombre por el hombre, la completa eliminación de la división de la sociedad en clases, la implacable supresión de los explotadores, el establecimiento de una organización socialista de la sociedad y la victoria del socialismo en todos los países”.
Es verdad que la Guerra Fría estaba en su apogeo y que los EEUU aprovecharon la inercia de esta “crítica” del socialismo para desgastar esa forma de ver el mundo. La publicación de un libro era entonces más potente que las armas. Esa idea se acabó, ahora están las redes sociales que hacen ver una cosa por otra si se pone la adecuada técnica y determinación.
Zhivago viene de “VIVO”, En verdad Tú eres el Cristo, el Dios vivo.
Aquí me siento identificada con él: “El poeta detestaba envejecer y se tomaba los cumpleaños como días de duelo, desdeñando cualquier intento de hacer una celebración”. Y sigue: “Estos inesperados amores eran un elixir que detenía el paso del tiempo”. Pasternak tenía una amante.
Varios de los aquí presentes coincidimos con Pasternak que ya agonizante comentó: “Todo está empapado de mierda. Y no sólo nosotros, sino en todas partes, en el mundo entero. Mi vida entera ha sido una pelea a solas contra la banalidad reinante, a favor del talento humano, libre y en acción”.
“En el prestigioso Instituto Literario Gorki, el director les dijo a los alumnos que tenían que asistir a una manifestación contra Pasternak y firmar una carta de denuncia que se publicaría en Literaturnaia gazeta”. De qué me suena esto: ¿podría ser un comunicado del sindicato de…?
Además de tener la pretensión de meterse en cada cuestión de la vida toda: el Totalitarismo.
Este blog comenzó por un listado de escritores suicidas. No están incluidos los que se mataron en la época soviética por ser una legión demasiado grande: Paolo Iashvili, que se mató de un disparo antes de que los inquisidores oficiales cerraran el cerco.
Pasternak tenía una determinación: que su obra fuera conocida en el mundo: “No importa lo que me ocurra a mí. Mi vida está terminada. El libro es mi última palabra en al mundo civilizado”.
Me encantó su lectura. Está muy bien escrito.
Editorial Bóveda. 2016.
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